El regreso de un clásico
El director mexicano Guillermo del Toro presentó este sábado su esperada adaptación de 'Frankenstein' en el Festival de Cine de Venecia, un proyecto de alto presupuesto basado en la novela de Mary Shelley. La película está protagonizada por Oscar Isaac como el científico Victor Frankenstein y Jacob Elordi como su creación.
La cinta, que explora temas de violencia, autoconocimiento e identidad con una marcada estética gótica, narra la historia del científico que da vida a una criatura que finalmente lo conduce a la ruina. Del Toro ha descrito el filme como "una historia emotiva" y "muy personal" centrada en la relación entre un padre y un hijo, distanciándose de una película de terror convencional.
El proyecto, que será distribuido por Netflix, representa la culminación de una fascinación que comenzó en su infancia. "La obra maestra de Mary Shelley está llena de preguntas existenciales, tiernas, salvajes, sin escapatoria", declaró el cineasta, ganador del Oscar y del León de Oro por 'La forma del agua'. "Para mí (...) sólo los monstruos tienen la respuesta a todos los misterios".
Manifestación en el Lido
Paralelamente a la presentación cinematográfica, en el Lido de Venecia, sede del festival, se convocó una manifestación en apoyo a Palestina. La marcha, organizada por el colectivo de profesionales audiovisuales Venice4Palestine, se llevó a cabo bajo el lema "Paren el genocidio en Palestina".
En un comunicado, los organizadores afirmaron que su objetivo es "romper el silencio y desviar el foco del festival hacia Palestina". Sostuvieron que el evento "no debe quedar como un evento aislado de la realidad, sino convertirse en un espacio para denunciar el genocidio que está llevando a cabo Israel con la complicidad de los gobiernos occidentales".
El director artístico de la Mostra, Alberto Barbera, abordó la situación afirmando que el certamen es "un lugar de apertura y de debate". "Nunca hemos dudado en declarar claramente nuestro enorme sufrimiento frente a lo que está sucediendo en Palestina (...), con la muerte de civiles y, sobre todo, de niños", añadió Barbera.