Nuevas tensiones en el proceso legal
El litigio de divorcio entre la actriz Denise Richards y Aaron Phypers ha escalado con nuevas acusaciones centradas en una propiedad compartida. El pasado 19 de agosto, Richards presentó ante el Tribunal Superior de Los Ángeles una serie de fotografías como prueba de los severos daños que, según alega, su exesposo y la familia de este causaron en la residencia que compartieron en Calabasas.
Según documentos judiciales, las imágenes, tomadas el 3 de agosto, muestran varias habitaciones en estado de desorden y deterioro. En las fotografías se aprecian suelos parcialmente levantados, escombros y objetos personales esparcidos. “Aaron, sus padres y su hermano causaron graves daños a la propiedad y la dejaron en un estado de desorden”, afirmó la actriz en su declaración, añadiendo su sorpresa por la condición de la vivienda, en la que no había residido por más de dos años.
Versiones contrapuestas sobre los daños
Aaron Phypers ha negado las acusaciones y ofrecido una explicación alternativa. En declaraciones a medios, sostuvo que la alfombra de una de las habitaciones fue retirada por ser un “riesgo biológico”, ya que estaba “saturada de orina y heces” de los perros de Richards. “Esperábamos poder reemplazarlo todo”, señaló.
Phypers también afirmó que la mayoría de los objetos que aparecen desordenados en las fotografías pertenecen a Richards, quien, según él, los abandonó en la propiedad. “La situación era diez veces peor de lo que se ve en las fotos”, agregó.
Disputa económica y de pertenencias
El conflicto legal se extiende al ámbito financiero. Richards asegura que Phypers no ha cumplido con el pago del alquiler de la casa, motivo por el cual se iniciarían procedimientos de desalojo. La actriz declaró haber dejado en la residencia objetos personales y pertenencias de su difunta madre con la intención de recuperarlos.
Por su parte, la defensa de Phypers argumenta que estas acciones buscan desviar la atención y que Richards ha retenido las pertenencias de su exesposo, tanto personales como profesionales. “No tengo nada de mi ropa. No tengo dinero; he estado intentando vender algunas cosas aquí y allá. No tengo el equipo para hacer mi trabajo”, declaró Phypers, quien afirmó haber tenido que pedir ropa prestada para una audiencia judicial virtual.
Contexto del divorcio
La pareja se separó el 4 de julio, y Phypers solicitó la disolución del matrimonio el 7 de julio tras seis años de relación, citando “diferencias irreconciliables”. El caso se ha complicado aún más por acusaciones de abuso físico presentadas por Richards, que llevaron a la corte a emitir una orden de restricción temporal en su favor. Phypers ha negado categóricamente dichas acusaciones, calificándolas de “completamente falsas y profundamente hirientes”.
