Max Verstappen no logró más que un segundo puesto en el Gran Premio de Zandvoort, su carrera de casa, después de que una audaz estrategia de Red Bull con neumáticos blandos en la salida no fuera suficiente para contrarrestar el ritmo superior de McLaren. Ante su público, el plan del equipo era realizar un ataque inmediato para tomar la delantera.
"El plan era adelantar por el exterior en la curva tres. El impulso estaba ahí, pero entonces llegó el deslizamiento lateral", explicó Helmut Marko, asesor de Red Bull. Verstappen tuvo un derrape notorio en la segunda curva, aunque logró controlar el monoplaza. "Tuve que intentarlo con el neumático blando. Por desgracia, había demasiada arena en la pista. Me fui un poco de lado, pero conseguí aguantar", comentó Verstappen posteriormente. Sin embargo, la desventaja de la estrategia se hizo evidente rápidamente: los neumáticos blandos se degradaron a un ritmo mayor de lo previsto.
McLaren, por su parte, adoptó un enfoque opuesto, optando por el compuesto de neumáticos duros, una elección que les brindó consistencia y durabilidad. "Muchos optaron por los neumáticos blandos porque no les quedaban duros. Para nosotros, estaba claro que el neumático duro tenía el agarre suficiente para ser consistente en este circuito", señaló un representante del equipo. La estrategia resultó acertada, permitiéndoles establecer un ritmo estable y distanciarse.
Verstappen reconoció la superioridad de sus rivales. "Una vez que estuve delante, inmediatamente me di cuenta: Esto no es bueno. Si me defiendo durante tres vueltas, solo arruinaré mi carrera. Se notaba que están en otra liga", admitió el piloto.
Red Bull defiende la estrategia de riesgo
A pesar del resultado, Red Bull defendió la decisión táctica. "Era la única oportunidad que teníamos de luchar, aunque fuera temporalmente, con McLaren. La única opción era la elección superagresiva de blando y medio. Sabíamos que eso nos perjudicaría más adelante, pero al menos podíamos intentar algo", explicó la dirección del equipo. La maniobra inicial de Verstappen generó tensión en el muro de boxes. "Trabajas con él todos los días, pero incluso a nosotros nos sigue sorprendiendo lo que es capaz de sacar a veces. Esa vuelta uno... te deja sin aliento por un momento".
Para Helmut Marko, el segundo lugar fue un resultado importante y una mejora significativa tras las dificultades del equipo en carreras anteriores. "En realidad, el tercer puesto habría sido merecido. Pero después de los problemas de Hungría, es una clara mejora. Ahora entendemos mejor algunas de las causas. Todavía no están resueltas, pero vamos en la dirección correcta", afirmó.
De cara al futuro, Red Bull identifica oportunidades en circuitos de alta velocidad. "Singapur seguro que no será nada. Pero Azerbaiyán, Austin, Jeddah... cuanto más rápida sea la pista, mejor para nosotros", proyectó Marko. Verstappen se mantiene realista pero combativo: "McLaren es simplemente más fuerte en este momento. Pero no nos vamos a rendir. Todavía hay oportunidades este año y lo intentaremos todo".