Un último concierto en Birmingham
El 5 de julio, Osbourne ofreció lo que sería su última presentación en vivo en Birmingham, su ciudad natal. El evento fue un concierto benéfico a gran escala que logró recaudar más de 190 millones de dólares. Tom Morello, guitarrista de Rage Against The Machine, se desempeñó como director musical del evento, concebido como un homenaje a la carrera del artista.
Frente a 40.000 espectadores, Osbourne, sentado en un trono negro, interpretó clásicos como “Paranoid” y “Crazy Train”. Morello describió la atmósfera como un reconocimiento profundo al legado del músico. “La banda pudo tocar y sentir el cariño no solo de las otras bandas, no solo de las 40.000 personas en el estadio, sino de gente de todo el mundo”, relató Morello a la revista PEOPLE.
Conciencia de una despedida
En una entrevista posterior con la radio Q101 de Chicago, Morello señaló que Osbourne parecía plenamente consciente de que se trataba de su despedida de los escenarios. “Vivió un estilo de vida bastante al límite durante mucho tiempo”, comentó el guitarrista. “El hecho de que viviera para tocar y sentir ese amor, y para una vez más... hacer ‘Paranoid’, hacer ‘Crazy Train’. Si tienes que irte, realmente sentía que él lo sabía”.
Según Morello, tras el concierto, Osbourne participó en una reunión privada con amigos y colegas, consciente de su fragilidad pero disfrutando del momento. Apenas tres semanas después, su fallecimiento fue confirmado.
Lucha contra la enfermedad y legado
Durante sus últimos años, Osbourne enfrentó serios problemas de salud, incluyendo una enfermedad cardíaca y un diagnóstico de Parkinson con disfunción autonómica. En su programa de radio en SiriusXM, había manifestado su determinación para realizar el concierto final: “Si mi Dios quiere que haga el show, lo haré. Por las buenas o por las malas, lo lograré”. Para ello, trabajó con un entrenador especializado.
Los fondos recaudados en el concierto de Birmingham fueron destinados a instituciones como el Hospital Infantil de Birmingham, el Hospicio Infantil Acorn y la fundación Cure Parkinson’s. La familia Osbourne confirmó el fallecimiento el 22 de julio, informando que el cantante murió en compañía de sus seres queridos. La causa oficial fue un paro cardíaco extrahospitalario, agravado por una enfermedad de la arteria coronaria y su condición de Parkinson.