Cuatro décadas después de su final, 'Los Dukes de Hazzard' permanece como un referente de la televisión estadounidense de los años 80. Sin embargo, las vidas de sus protagonistas, John Schneider y Tom Wopat, quienes interpretaron a los primos Bo y Luke Duke, han transitado por caminos de éxito y controversia, incluyendo problemas legales que han atraído la atención pública.
La serie, creada por Gy Waldron, se estrenó en 1979 en la cadena CBS como un reemplazo temporal y superó todas las expectativas. Se convirtió en un éxito rotundo, llegando a congregar hasta 40 millones de espectadores los viernes por la noche. Su vehículo icónico, un Dodge Charger de 1969 conocido como el 'General Lee', se transformó en un símbolo cultural, al punto de que una réplica propiedad de Schneider fue subastada por cerca de 10 millones de dólares en 2007.
El elenco y las disputas contractuales
La trama se centraba en los primos Bo y Luke Duke, quienes representaban la rebeldía contra la corrupción local. La dinámica entre el impulsivo Bo (Schneider) y el reflexivo Luke (Wopat) fue clave para la popularidad del programa. El proceso de selección de actores incluyó anécdotas como la de Schneider, quien con 18 años, fingió ser mayor y tener acento sureño para obtener el papel.
El elenco principal se completó con Catherine Bach como Daisy Duke y Sorrell Booke en el papel del antagonista Boss Hogg. El programa también enfrentó turbulencias internas. Durante la quinta temporada, Schneider y Wopat abandonaron la serie debido a disputas salariales. Fueron reemplazados por dos nuevos personajes, pero la reacción negativa de la audiencia llevó a la producción a reincorporar a los actores originales.
Problemas legales y vida posterior
Fuera de la pantalla, los actores han enfrentado serios problemas legales. En 2018, John Schneider fue sentenciado a tres días de prisión por incumplimiento en el pago de la pensión alimenticia. En 2023, fue investigado por el Servicio Secreto tras una publicación en redes sociales dirigida al presidente de Estados Unidos, Joe Biden. Por su parte, Tom Wopat fue condenado en 2018 a un año de libertad condicional tras declararse culpable de cargos de acoso sexual y posesión de drogas.
A pesar de estas dificultades, el legado de 'Los Dukes de Hazzard' perdura, y la relación entre sus protagonistas se mantiene. La serie continúa siendo transmitida y descubierta por nuevas generaciones, consolidándose, como afirmó el actor Ben Jones —quien interpretó a un personaje secundario y luego fue congresista—, como “una parte permanente de la cultura americana”.
