El impacto de los vehículos en el microclima urbano
Un estudio reciente realizado por científicos en Portugal ha revelado que los vehículos estacionados en la vía pública contribuyen de forma considerable al aumento de la temperatura en los entornos urbanos, un fenómeno conocido como 'isla de calor'. El efecto es particularmente pronunciado en automóviles de colores oscuros, que absorben una mayor cantidad de radiación solar.
La investigación, llevada a cabo en Lisboa, se centró en medir el impacto térmico de los coches en su entorno inmediato. Los científicos estacionaron un vehículo de color negro y otro de color blanco en una zona urbana asfaltada durante las horas de máxima insolación. Los resultados mostraron que el aire alrededor del coche oscuro experimentó un aumento de hasta 3,8 grados Celsius. Si bien el vehículo blanco también generó un incremento de la temperatura, este fue un grado inferior.
Las 'islas de calor' y sus causas
Las islas de calor son áreas urbanas que registran temperaturas notablemente más altas que sus zonas rurales circundantes. Tradicionalmente, este fenómeno se ha atribuido a factores como la absorción de calor por parte del asfalto y los edificios, junto con la escasez de vegetación. Las superficies oscuras, como el pavimento, absorben la mayor parte de las longitudes de onda de la luz solar, mientras que las superficies claras las reflejan.
De manera similar, la falta de zonas verdes limita el efecto de enfriamiento natural que proporcionan las plantas a través de la transpiración, un proceso que libera vapor de agua a la atmósfera. Este nuevo estudio añade a los vehículos, compuestos por estructuras metálicas y a menudo pintados en tonos oscuros, como un factor relevante en la intensificación de este microclima urbano.
Implicaciones y recomendaciones
Al extrapolar los datos obtenidos de un solo vehículo a las cifras totales de tráfico y estacionamiento de una ciudad como Lisboa, los autores del estudio concluyeron que el impacto acumulativo podría ser significativo para la temperatura general del ambiente urbano.
Ante estos hallazgos, los investigadores sugieren la implementación de medidas específicas para mitigar este efecto. Entre las propuestas se incluye la posibilidad de restringir el estacionamiento de vehículos de colores oscuros en áreas particularmente afectadas por las islas de calor. Asimismo, recomiendan aumentar la disponibilidad de estacionamientos con sombra y fomentar el uso de materiales en la fabricación de automóviles que reduzcan la absorción de calor.