Un estudio académico reciente de la CQUniversity en Australia sugiere que la serie animada 'Bluey' puede ser una herramienta eficaz para fomentar la resiliencia en los niños. El análisis contrasta la serie con otras producciones infantiles contemporáneas, muchas de las cuales, según expertos, están diseñadas para maximizar el tiempo de pantalla a través de estímulos constantes.
La serie, que narra la vida cotidiana de una familia de perros en Brisbane, Australia, fue analizada en su totalidad por los investigadores. Estos concluyeron que los episodios ofrecen lecciones sobre la resiliencia, una cualidad psicológica que permite a los individuos adaptarse y superar la adversidad. El desarrollo de esta capacidad desde una edad temprana es considerado fundamental por especialistas en desarrollo infantil.
El diseño de la animación y su impacto en los niños
El estudio pone de relieve una preocupación creciente sobre el diseño de ciertos programas infantiles. Se señala que el uso de cambios de escena rápidos, colores brillantes y una sucesión de estímulos está orientado a activar los sistemas de recompensa del cerebro, que liberan dopamina. Si bien este mecanismo es natural, su sobreestimulación en cerebros en desarrollo puede generar patrones de comportamiento adictivo, incentivando un consumo prolongado de contenido.
'Bluey', en cambio, presenta un ritmo más pausado que, según los investigadores, la diferencia de este modelo de producción, evitando así las estrategias que buscan generar dependencia.
Metodología y hallazgos del estudio
Para su análisis, el equipo científico visionó todos los episodios de las tres temporadas disponibles y clasificó su temática principal. Los episodios que abordaban la resiliencia fueron categorizados según el modelo de Edith Grotberg, quien en 1995 definió tres pilares de esta cualidad: 'soy' (valores y fortalezas internas), 'puedo' (capacidades y habilidades) y 'tengo' (redes de apoyo y recursos externos).
Los resultados indicaron que la resiliencia es un tema primario o secundario en aproximadamente la mitad de los episodios. Aunque el juego creativo fue la temática primaria más frecuente (30%), la resiliencia le siguió de cerca con un 27,3%. El estudio también encontró que los padres del personaje principal son los principales facilitadores de estas lecciones en un 64,4% de los casos, destacando el rol de la figura materna. Los episodios suelen mostrar cómo el personaje aprende a superar un desafío cotidiano con la guía de sus padres, aplicando luego ese aprendizaje con resultados positivos.
Los investigadores concluyen que las herramientas presentadas en la serie son aplicables a situaciones de la vida real. Sugieren que su efectividad puede verse reforzada cuando los niños ven el programa en compañía de sus padres, quienes pueden dialogar sobre los mensajes presentados, convirtiendo el entretenimiento en una experiencia con valor formativo.