La chef boliviana comparte hoy una de esas recetas que evocan recuerdos de infancia y el calor del hogar: las tradicionales Humitas Bolivianas. Este platillo, elaborado a base de maíz fresco, es un verdadero manjar que se disfruta en diversas regiones de Bolivia, ya sea como un desayuno sustancioso, una merienda deliciosa o un acompañamiento en festividades.
Preparar humitas es un arte que combina la dulzura natural del choclo con el toque salado del queso, todo envuelto en las mismas hojas de maíz que lo vieron nacer. Es una receta que celebra la abundancia de nuestra tierra y la sabiduría de nuestras abuelas.
INGREDIENTES
- 12 choclos grandes y tiernos (maíz fresco)
 - 250 gramos de queso criollo (o mozzarella), cortado en cubos pequeños
 - 200 gramos de mantequilla sin sal (o manteca vegetal), derretida
 - 1/2 taza de azúcar (ajustar al gusto, si el choclo es muy dulce o se prefiere más salado)
 - 1 cucharadita de sal (ajustar al gusto)
 - Chalas de choclo (hojas de maíz) suficientes y en buen estado para envolver
 - Agua para la cocción
 - Pasas (opcional, al gusto)
 
PREPARACIÓN
- Para comenzar, la chef recomienda seleccionar choclos frescos y tiernos. Se deben desgranar los choclos, cuidando de no dañar las chalas (hojas), ya que serán utilizadas para envolver las humitas. Las chalas se reservan y se lavan bien.
 - Una vez desgranados, se procede a moler los granos de choclo. Esto se puede hacer en un molino de granos o en una licuadora, añadiendo un poco de agua o leche si fuera necesario para obtener una pasta espesa y homogénea.
 - En un bol grande, se vierte la pasta de choclo molido. Se agrega la mantequilla derretida (o manteca), el azúcar y la sal. La chef enfatiza la importancia de mezclar muy bien todos los ingredientes hasta que estén completamente integrados. Este es el momento de probar la mezcla y ajustar el punto de dulzura o salado según la preferencia personal.
 - Ahora es el turno de armar las humitas. Se toman dos chalas de choclo, una encima de la otra y en sentido contrario, formando una base. En el centro de esta base, se coloca una porción generosa de la mezcla de choclo, aproximadamente dos cucharadas. Sobre la mezcla, se añade un cubo de queso criollo y, si se desea, unas cuantas pasas.
 - Con cuidado, se doblan los extremos de las chalas hacia el centro, formando un paquetito rectangular o cuadrado. La chef sugiere atar cada humita con una tira de la misma chala o con hilo de cocina para asegurar que no se abran durante la cocción.
 - En una olla grande, se coloca una base de chalas limpias en el fondo para evitar que las humitas se peguen. Luego, se disponen las humitas de forma ordenada. Se añade agua hasta cubrir aproximadamente la mitad de las humitas.
 - Se cocinan a fuego medio-alto durante unos 45 minutos a 1 hora, o hasta que las humitas estén firmes y el choclo cocido. La chef aconseja verificar el punto de cocción pinchando una humita con un tenedor; si sale limpio, están listas.
 - Una vez cocidas, se retiran las humitas de la olla y se dejan reposar unos minutos antes de servir. Se disfrutan calientes, desenrollando las chalas para revelar el suave y aromático contenido.